lunes, 1 de octubre de 2007

Tercer caso: incendio en torres del paine



En un 17 de febrero del año 2005 un turista checo se encontraba cocinando en un lugar no habilitado para acampar, y sin darse cuenta su cocinilla se volcó sobre pastizales que habían en la zona, esto produjo un gran fuego inicial, y que ayudado por los vientos se propagó por un territorio bastante extenso sin encontrar mayores dificultades y por el contrario ayudado por los pastizales y el viento prendió árboles que se encontraban en la zona. Después de ser declarado el incendio se procedió a intentar extinguirlo, lo que fue en extremo difícil, e incluso teniendo que pedir ayuda a brigadistas argentinos, finalmente después de 2 semanas y aproximadamente 15.175 hectáreas incineradas el fuego se extinguió definitivamente en la zona. La restauración de de todo el entorno de flora costara cerca de 800.000 pesos por hectárea.

Este incendio a producido muchos efectos negativos, los cuales en este caso no involucran a personas directamente, pero si al patrimonio natural del país y a el potencial turístico de la zona. Esto sin mencionar el daño que se le a propinado a la naturaleza propia de la zona, y en este caso no solo se puede hablar de animales sino que aquí también hay presente daño a la flora de la zona.

Mi punto de vista en este tema es un poco menos duro que los casos anteriores, ya que aquí hubo un claro sentimiento de arrepentimiento por parte del turista checo que provoco todo el problema, pero también hay que decir que las disculpas no solucionan el incendio ni tampoco pagan los daños causados y si bien es cierto que el turista checo tiene un grado de responsabilidad por no acampar en un lugar autorizado, también la culpa la tienen las autoridades que hacen las leyes para este tipo de sucesos, ya que si no fuera porque el turista checo dono 1.000 dólares a CONAF solo abría pagado al estado chileno 250.000 pesos

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